"Que nadie me vea como a una víctima,
sino como a alguien que nunca dejó de luchar
con valentía y pagó el precio que le tocó pagar"
Paulo Coelho. La espía.
“Elegante es la cualidad del infortunio,
que como un pato feo y menudo,
lleva en su interior
un suave y sedoso plumaje”
Con esta frase, de cosecha propia, rubrico las dedicatorias de mi libro “La esencia que hay en ti “.
Ser visionario, en muchos aspectos, me ha conllevado, en más de una ocasión, a sentirme de alguna que otra manera, diferente. Con estas palabras, aquí expuestas, pretendo infundir confianza en aquellos que han elegido ser visionarios en alguna de sus facetas como personas: trabajo, alimentación, salud, ocio...
Un antiguo maestro mío, en su momento me dijo que ya iría encontrando “cisnes” en mi camino y que lejos quedarían los momentos en los que uno se sentía un patito más, y quizá más feo y menudo que los demás.
Gracias a este maestro, pude conocer de primera mano la meditación, ahora hace ya 20 años, cuando por entonces no era un tema muy conocido. Un día después de una clase le comenté que estaba interesado en saber sobre el Buda, ya que había leído una de sus frases y que esta había atraído mi curiosidad. La frase en concreto era esta:
“No te creas nada de lo que yo te diga, he aquí la barca, he ahí la isla, coge la barca, ve a la isla y averigua por ti mismo que hay en la isla”
Su respuesta fue inmediata, una ligera carcajada y después me contestó:
¡Ah, tu lo que eres es un rebelde!
En ese momento no entendí el significado que le dio a la palabra rebeldía, pero con el tiempo he aprendido a no dejar de luchar por mis ideales, aunque por ellos haya tenido que estar en lucha con mi propio entorno y sentirme en cierta forma diferente a los demás.
Hoy en día todo el mundo, quien más o quien menos ha oído hablar de la meditación. Incluso hay un buen número de personas que la practican. Muchos son los métodos y las maneras de hacerlo. Pero con todo el respeto, no voy a cuestionar si uno es mejor que otro o no. Ya que, no quiero caer en la presuntuosidad de que la forma de meditación que yo practico es por sí misma la mejor que nadie puede encontrar.
De lo que si quiero tratar es de como nos hemos podido sentir aquellas personas que hemos tenido de luchar por no sentirnos diferentes a los demás, y como con el tiempo hemos aprendido a reconocer nuestros propios méritos. Ya que estos no solo nos han servido para recorrer nuestro propio camino, sino que además, han indicado el camino a recorrer a muchas personas en su necesidad de encontrarse a si mismas.
Así, me surge la necesidad de vanagloriar a aquellos que en algún que otro momento han sentido que su camino elegido se contradecía con el convencimiento social del momento. Han sabido entender que su ideal iba más allá de seguir una norma socialmente impuesta, y que sus convicciones iban a mejorarlos como personas. Además de ser indicadores para un progreso socialmente construido, donde poder compartir sus conocimientos y transmitirlos a los demás.
Quizá el tiempo les haya dado la razón, y hayan podido transmitir de alguna manera sus ideales. Pero estos, lejos de querer ser objeto de una norma a seguir, les habrán servido para corroborar su convencimiento de que de alguna forma iban a mejorar primero ellos y después mejorar su entorno.
A aquellos que a través de cambiar su paradigma consiguen que otros crean que cambiar paradigmas es no solamente posible sino también necesario. A todos ellos, mis más sinceros respetos.
Si estás dispuesto a compartir, quizá puedas responder a esta pregunta:
¿En que te sientes un visionario?
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